En el tomo 16 del Zohar de la versión de Rav Berg página 115 encontramos el texto en español y arameo que vemos en la imagen.
Este prólogo requiere algunas consideraciones. En primer lugar surge la pregunta ¿Acaso Dios necesita que lo veneren? Y en todo caso ¿Qué sería venerar a Dios?
Definitivamente Dios no necesita ninguna veneración.
En efecto, la relación de Dios con el hombre va en otro sentido. Decía el Doctor José Manuel Estrada, el Hermano Mayor, “Dios se conoce a través de la forma humana” coincidiendo totalmente con la Tradición de la Kabbalah que nos dice que Dios crea al hombre para poder conocerse a través de él, de manera que cada vez que te transformas le das a Dios una oportunidad adicional de conocerse a través de ti, eso es reverenciar, honrar, venerar un pacto del cual no te acuerdas pero que sin embargo fue firmado en el origen de los tiempos: dar a Dios la oportunidad de conocerse.
Además es obvio que Dios da sustento a todo ser existente ya que en caso contrario, la creación del Eterno desaparecería. Así la expresión del Zohar “Dar sustento” se refiere a que ese mecanismo se enfatiza, se pone de relieve, se vuelve abundante.
Otro punto que nos resulta claro es acerca del hecho de que el Eterno da el sustento a todos los seres independientemente de como se comporte alguno en especial.
En segundo lugar, todos, absolutamente todos, somos hijos de Dios, todos somos de su familia. Entonces ¿a que se refiere la expresión del Zohar “Ser de su familia”?
Es una metáfora que se entiende en cuanto revisamos una familia en general y nos damos cuenta, que por lo regular, los miembros de una familia están cercanos entre si.
Así esa metáfora se refiere a aquellos que están “cerca” de Él. La cercanía en un sentido espiritual se refiere a una proximidad de características, a una proximidad de naturaleza, no a una cercanía física que se puede medir en metros, kilómetros o centímetros. Aquellos que van trascendiendo su naturaleza instintiva y egóica se van acercando al Eterno, logran, en términos del Zohar, “Ser de su Familia”.
Además, el Prólogo de esta Parashat del Zohar, en la versión del Rav Berg, se refiere a los “Justos”.
Sabemos que el Eterno es Justo, de manera similar a como lo expresa el Bhagavad Gita, no tiene preferencia por ninguna de sus criaturas, no se inclina por una si y por otra no, eso es ser “Justo”, característica que va desarrollando el caminante en el Sendero de la Tradición de Sabiduría de la Kabbalah.
Volvamos al texto del Zohar, específicamente al versículo 31 de la Parashat Emor, el siguiente con el que iniciamos este estudio:
31. Él pregunta: ¿Cuál es el significado de: “Da alimento a quienes lo veneran”?
Y responde que esto se parece a las palabras:
“Ella se levanta cuando todavía es de noche y prepara alimento para su familia…”
Proverbios 31:15
Una práctica que observamos que realizan cotidianamente los estudiantes de Rav Shimón Bar Yojai es levantarse a medianoche a estudiar la Torah. Esta práctica tiene como objetivo el activar algunos mecanismos mediante los cuales el estudio de la Torah, la Biblia en Hebreo, le brinda al estudiante de Kabbalah una oportunidad para acercarse a lo sagrado y extraer de los mundos superiores bendiciones que van a mejorar paulatinamente su vida.
Sin embargo en este estudio no exploro el sentido metafísico sino el metafórico de “levantarse a medianoche”.
Para ello revisamos la noche como metáfora.
De tiempo en tiempo nos enfrentamos a experiencias difíciles, experiencias que no sabemos resolver, que no entendemos, que nos causan sufrimiento, dolor, un sentimiento de soledad, eso es lo que se entiende en un sentido metafórico ”estar atravesando la obscuridad de la noche”.
Nos dice San Juan de la Cruz en el capítulo 8 de “La noche oscura”:
La primera purgación o noche es amarga y terrible para el sentido, como ahora diremos. La segunda no tiene comparación, porque es horrenda y espantable para el espíritu, como luego diremos.
Por contraste a la noche, tenemos la luz, también como metáfora.
El elemento central para resolver los retos que nos impone la vida es nuestra consciencia la cual se amplia conforme resolvemos cada vez más dificultades, más problemas, esto nos da “claridad” acerca de las circunstancias que se nos presentan, por eso el Guru Sat Arhat Carlos Michan se refiere a esta experiencia como “Luz de Consciencia”, termino que me resulta muy congruente y consistente como contraparte, como complemento a la metáfora de la obscuridad.
Así entonces, “levantarse a medianoche”, cuando la obscuridad es mayor, cuando las dificultades y el sufrimiento son mayores, se refiere a “no dejarse caer” a levantarse ante la adversidad y esforzarse en dar solución a aquello que lo desanima, que hace sentirse derrotado al caminante.
Justo cuando el caminante “se levanta” y resuelve aquel reto es cuando Dios conoce, a través de ese caminante, un poco más de su propio poder reflejado en la determinación y capacidad que el caminante tuvo para salir adelante.
Ahora ese caminante podrá “alimentar”, con su experiencia, a futuros caminantes que escuchen acerca de como le hizo para trascender ese reto.
Veamos pues que nos dice el Budhismo y la neurociencia acerca del sufrimiento, acerca de la obscura noche del alma, en un lenguaje totalmente diferente, pero, que sin embargo se refiere a la misma experiencia humana, a través del neurocientífico Rick Hanson:
Solo los humanos nos preocupamos por el futuro, lamentamos el pasado y nos culpamos por el presente. Nos sentimos frustrados cuando no podemos tener lo que queremos, y decepcionados cuando acaba lo que nos gusta. Sufrimos porque sufrimos. Nos molesta el dolor, nos sentimos enfadados por la muerte, tristes por despertar tristes otro día. Esta clase de sufrimiento, que abarca la mayor parte de nuestra infelicidad e insatisfacción, es construido por la mente. Lo cual es irónico, patético… y maravillosamente esperanzador.
Rick Hanson continua:
La vida tiene muchas alegrías y placeres, pero también muchas incomodidades y penas, desgraciados efectos colaterales de tres estrategias que evolucionaron para ayudar a los animales, nosotros incluidos, a pasar sus genes.
Estas estrategias funcionan muy bien para asegurar la supervivencia, pero acarrean sufrimiento.
En resumidas cuentas, cuando una de estas estrategias encuentra problemas, recorren nuestro sistema nervioso señales de alarma incómodas, a veces dolorosísimas, para colocar al animal otra vez en su camino.
Por eso es importante conocer las tres estrategias que la naturaleza ha utilizado para dar continuidad a la vida, generación tras generación.
Rick Hanson nos explica:
Los problemas ocurren continuamente, dado que cada estrategia contiene contradicciones inherentes, a medida que el animal intenta:
- separar lo que está relacionado, para crear una frontera entre sí mismo y el mundo.
- estabilizar lo que siempre cambia, para mantener sus sistemas interiores dentro de límites precisos.
- conservar placeres huidizos y evitar dolores inevitables, para aprovechar oportunidades y evitar amenazas.
Estas estrategias las analizaremos en detalle en otro estudio ya que nos dan luz acerca de procesos de nuestra mente que nos auxilian a trascender el sufrimiento.
Gustavo S Téllez Rangel vive en Pachuca, Hidalgo, México. Actualmente ostenta el Segundo Grado Iniciático, Gagpa, en la Gran Fraternidad Universal, Línea Solar. Su vertiente principal de conocimiento es Kabbalah, sus intereses se centran en la Ciencia, en especial la neurociencia y Pensadores actuales del Mundo Empírico. Ingeniero en Comunicaciones y Electrónica en el IPN. Maestría en Computación en el CINVESTAV.